en una ciudad en ruinas
que entre escombros languidece
y se desmorona segundo a segundo
El cielo más oscuro
que puedas imaginar
se extiende ante mí
Dolor sin tregua
incendia mi alma

duele el pensamiento
duele el corazón
duele hasta el alma
hasta deshacerse
entre cenizas quebradizas
entre los restos de un caos inmisericorde
Se escapa la vida
entre la fría luz de un pasillo
que conduce hasta el final
de una existencia llena de dolor
duele la mirada
duelen los insultos
duele el desprecio
Sólo soy un saco de huesos rotos
escombros de una vida sin sonrisas
ruinas llenas de dolor
largo camino a la perdición
Sólo soy un saco de huesos
desgarrados por el tiempo
no encuentro un poco de paz
si el dolor no da tregua
duele la ausencia
duele la ignorancia y la sabiduría
duele el silencio roto
duele la indiferencia
duele el amor
duele vivir.